No te preocupes, conocer la capital de la provincia puneña de San Ramón, Juliaca, es muy sencillo. Hay vuelos nacionales que arriban al aeropuerto Manco Cápac. Recomendamos comprar los pasajes aéreos baratos de aerolíneas como Lan y Taca Perú. Desde Lima, el viaje dura una hora y 20 minutos, aproximadamente. Ahí va otra alternativa: Viajar hacia Arequipa y, desde la Ciudad Blanca, utilizar el trayecto terrestre hacia la ciudad puneña, situado a unas cuatro horas de viaje en bus.
Juliaca se encuentra a 3 mil 824 metros sobre el nivel mar, en la orilla occidental del famoso Lago Titicaca. Está rodeada de una cadena de hermosas montañas, por lo que predominan las temperaturas bajas. No en vano, Juliaca también es conocida como la “Ciudad de los Vientos”, así que toma tus precauciones, y, si te animas por las interesantes ofertas de vuelos nacionales a Juliaca, lleva contigo ropa abrigadora, como cortavientos, casacas y pantalones gruesos.
La confección de prendas hechas con lana de ovejas y alpaca es una de las principales actividades económicas de la ciudad, al igual que el comercio y hasta el contrabando, por su cercanía con Bolivia. Por eso, Juliaca también es considerada como la “capital comercial de Puno”.
Turismo en las alturas
Ahora sí, al grano. Para pasar unas excelentes días en Juliaca, recomendamos visitar la Iglesia Matriz de Santa Catalina, localizada en la Plaza de Armas. Es un monumento construido con materiales andinos y de estilo barroco indigenista, vale la pena apreciar cada detalle. Continuando con los recintos eclesiásticos, podemos darnos una vuelta por la plaza Bolognesi, para conocer la iglesia de la Merced, labrada en piedra caliza roja y considerada un descollante ejemplar de la arquitectura republicana. Y, aprovechando el recorrido por la plaza, hay que ver la Galería de las Calceteras, un pequeño mercado donde se venden productos textiles y artesanales.
Otro templo de interés es el Convento Franciscano de Juliaca, conocido como el Convento de Santa Bárbara. La edificación está situada en el Cerro Hatun Rumi y destaca por sus más de 100 ventanales arqueados. Con algo de tiempo, durante el día puedes admirar el Cristo Blanco y el Mirador Waynarroque, situado en la cumbre del cerro homónimo. Al pie del Cristo Blanco, el turista se deleita con una visión espectacular de gran parte de la ciudad.
Y, como no podía faltar, aprovecha tu estadía en la ciudad para conocer el majestuoso Lago Titicaca, especialmente para islas como Uros, Taquila y Amantani. Diariamente, en la ciudad ofertan tours y visitas guiadas para recorrer el lago natural más grande del mundo.