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Fundada muy probablemente en el burgo del siglo once es ahora una ciudad un tanto subestimada y llena de contrastes arquitectónicos. En su paisaje predominan las cuadras de apartamentos que contrastan con los hermosos alrededores de Rynek (la plaza principal). ¿Qué vale la pena ver en Rzeszów?

Te sugerimos que comiences el recorrido desde la parta antigua de la ciudad, es decir, desde Rynek en cuyo sitio principal está ubicado un destacado y monumental ayuntamiento de estilo neogótico y neorenacentista. Es allí que están ubicados los mejores restaurantes y cafés y en donde se llevan a cabo eventos culturales. También vale la pena caminar a través de las acogedoras calles que salen de Rynek como Kopernika, Słowackiego, Kościuszki or 3 Maja, que es el principal paseo de la ciudad. “Paniaga”, como es conocido por los locales, es un corazón moderno de la ciudad con numerosos edificios históricos, tiendas y restaurantes con patios cerveceros. Especialmente llamativas son la Iglesia de la Santísima Cruz con su fachada en blanco de nieve y las iglesias de San Wojciech y San Estanislao. Algo interesantes es que los habitantes de Rzeszów aman tanto la calle más antigua y representativa de la ciudad que cada año, en el mes de mayo, ellos organizan una fiesta en su nombre.

Si en ti vive un gran deseo por descubrir, entonces tienes que irte de turismo a Podziemna Trasa Turystyczna (la ruta subterránea turística) abierta en el 2001. La entrada es cerca del ayuntamiento por el lado de la calle Słowackiego (Rynek 26). Después de pasar por ella, encontrarás 400 metros de corredores subterráneos renovados a través de los cuales  llegarás a 40 salas que sirvieron como sótanos para productos. Durante el viaje de una hora también podrás ver numerosos objetos en exposición que fueron descubiertos durante los trabajos arqueológicos y escuchar las interesantes historias que el guía cuenta sobre la turbulenta historia de Rzeszów. La ruta está abierta durante todo el año a los visitantes, se entra cada hora y las entradas cuestan 6.5 zlotys por persona.

En la cocina de la región subcarpática – en la cual está ubicada Rzeszów – los platos más populares se llaman “proziaki”, tortas planas horneadas hechas de harina, leche agria, soda y sal. Estas son servidas en hoteles, en los mercados o durante los festivales tradicionales de cosecha. También recomendamos probar un plato llamado “hałuszki”, pequeños y deliciosos fideos hechos de papa con huevo, cocinados en agua hirviendo y servidos con leche, mantequilla o cebolla. Igualmente populares son los “kołduny”, pelotas ovaladas de masa hechas con papa y cuyo relleno es de papas cocinadas y queso con cebollas horneadas sobre grasa. Rzeszów es un lugar perfecto para saborear los platos polacos más famosos – pierogi (pelotas de masa), gołąbki (repollo relleno de carne) y żur (sopa de centeno agrio) – que de acuerdo con los residentes locales son servidos de la mejor manera allí. ¿Dónde comer? En restaurantes: Konfitura en el número 8 de la calle Słowackiego, Wesele en el 23 de la calle Rynek y Karczma Wacławówka en el 7 de la calle Strażacka.